22 de Julio de 2021
El Rey de Copas debía ganar en Avellaneda para dar vuelta la serie que arrancó 0-1 en Brasil. Si bien tuvo infinidad de chances claras de gol, la mala puntería y una actuación descomunal del arquero rival impidieron alcanzar el objetivo.
El partido empezó con Santos muy agresivo en ataque y en la presión. A pesar de ello, Independiente supo acomodarse en la cancha y empezar a disponer de chances claras de gol. Primero, el portero brasilero le sacó un disparo en la línea a Alan Velasco. Luego, hizo lo propio con un rebote tras un centro de Silvio Romero. La tercera no fue la vencida, puesto que también le tapó un mano a mano Sebastián Palacios que segundos después se convirtió en el 1 a 0 de la visita, tras un contragolpe bien manejado por Carlos Sánchez y la definición de Kaio Jorge.
El Rojo lo siguió buscando también en el complemento, a pesar de la expulsión a Juan Manuel Insaurralde a instancias del VAR por una jugada que ni siquiera había sido infracción. Del otro lado del campo, João Paulo seguía siendo la figura.
Los ingresos de Saltita González y Rodrigo Márquez le dieron mayor dinámica al equipo. De hecho, fue el primero quien capturó una pelota perdida en el área y estampó el empate a falta de 20 minutos para el final.
En ese tiempo, también con los ingresos de Braian Martínez, Jonathan Herrera y Alan Soñora, el Orgullo Naciona se volcó definitivamente en ataque. Lo buscó hasta el minuto final, pero no se pudo.
El equipo dejó una buena imagen en ambos partidos pero se queda con las manos vacías. Ahora queda pensar en el torneo local y en la Copa Argentina.
¡Dale que esto sigue, Independiente!
(Prensa CAI)
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